El proceso
de experimentación en maqueta, a una escala que permitiera englobar todo el
ámbito y su entorno como conjunto, ha arribado en buen puerto. La primera etapa
consistente en probar diferentes tipologías que pudieran perfilarse como
posibles alternativas que dieran respuesta a las necesidades inicialmente detectadas,
reveló la línea de las estrategias a seguir.
En este
sentido se optó por un modelo basado en la porosidad, en el apilamiento, en la
yuxtaposición, en definitiva, por un espacio generador de transiciones que
propiciara las relaciones, en un entorno social que por su climatología desfavorable
no incita a ello.
Tras estos
primeros ensayos, donde de un reducido conjunto de elementos, ya condicionados
por una serie de reglas, tales como la ortogonalidad, la modulación, etc., se saltó a la aplicación del modelo a una
escala mayor, casi de barrio.
Una vez
alcanzada la extensión necesaria, se implantó en la parcela dada, testigo de
tiempos pasados que respira aires de renovación. Su emplazamiento privilegiado,
en contacto directo con el mar, no podía más que sugerir la interacción entre
tierra y mar, entre mar y tierra. Por ello, decidimos aventurarnos en romper esa
frontera, desgarrarla, e integrar el mar en nuestra propuesta. En un primer
intento, quizás tímido y contenido, se examinó el convertir la línea continua
en discontinua, salpicando a uno y otro lado de la misma.
Un camino
te lleva a otro, siempre desconocido. Qué pasaría si se llevara más allá, si se
difuminara aun más ese límite, logrando la tan ansiada "sutil transformación".
¿Porqué encorsetarse, teniendo el infinito tan cerca?
Echando la
vista atrás se puede afirmar que se ha conseguido, la transición isotrópica en
todos los sentidos.
Otras
líneas de investigación se han desarrollado durante estas últimas etapas, la
diversidad de tamaños entre módulos, no solo en planta sino también en altura, quedando
las puertas abiertas para acoger diversos usos y programas. El farming, tanto
el urbano como el marino, también se han ido perfilando, la aproximación al
ámbito desde el exterior, contemplando posibles accesos, la cuestión
bioclimática, la propia relación con el entorno, con el mar, con el propio
territorio, con la vegetación, etc.
Peroya se ha exprimido la escla 1/500, es
hora de dar otro salto, un cambio de escala que permita un mayor acercamiento a
la resolución del problema, fomentar las relaciones.
Antes cabe
reflexionar. Dónde estamos, de dónde partimos, hacia dónde vamos, que quedó por
el camino,....? Avituallamiento y a continuar, un nuevo amanecer está proximo.
"Palante
palante, como un elefante....."
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